miércoles, 24 de septiembre de 2008

CIERRE DE FILAS CON RUDI PERO CON RENOVACION


Esperaba asistir a un duelo entre candidatos a presidir el Partido Popular aragonés, pero un pacto final desde las oficinas de Génova propuso a una candidata de consenso: Luisa Fernanda Rudi.


A mí me hubiera gustado saber qué hubiera pasado en ese duelo y si realmente se apostaba por la renovación, no solo de caras sino también de ideas. Y si se aplicaba el signo de sumar y no el signo de restar.


Ahora, con candidata de consenso para presidir el Partido Popular aragonés tenemos dos tendencias que se sentarán a disputar en la "mesa de negociación", no en la "urna de votación".


Antonio Torres afirmó que apostaba por la renovación, que era un clamor de las bases del partido. Él entiende renovación más que en "edad" en equipo con ilusión de ganar.

Yo entiendo que renovación también implica nuevas caras.


Antonio Suárez también tendió la mano a Rudi ofreciéndose para el consenso, pero él es un personaje que le debe a Luisa Fernanda el estar donde está, con lo que "lealtad obliga".

Es una buena decisión, pero si va acompañada de otras.

A los afiliados del Partido Popular, en general, el nombre de Luisa Fernanda da más confianza, pero también le piden que prepare un equipo renovado, con capacidad de trabajo e ilusión de ganar.


Ella hizo el gesto necesario: "en el Partido Popular caben todos", "todos tienen un lugar para trabajar en el proyecto común". Ese discurso me gusta, si luego los elegidos realmente trabajan por el proyecto.


Cuenta con el apoyo de prácticamente todos los dirigentes del partido.

“Es la mejor decisión a favor del consenso”, “es lo que necesita el PP aragonés”, “es la candidata perfecta para plantar cara a Iglesias”, etc.

Todas las declaraciones públicas buscaron respaldar el nombramiento.

Pero a la vez se debería hablar de la necesidad de recuperar la ilusión, de hacer cambios en algunas estructuras y de renovar la formación.


Yo sigo recibiendo esta designación con cautela y frialdad.